El día siguiente, Hanamichi esta de mal humor porque perdió el partido, cuando Haruko quiere hablar con él, no tiene la fuerza para verla porque se siente mal por haber perdido, pero ella le da ánimos y lo felicita por haber jugado y le dice que su hermano no esperaba que jugara tan buen partido. Hanamichi se pone contento y luego de clases se va con Haruko a comprar sus zapatos de baloncesto.