Superviviente de la explosión del planeta Krypton, la ciudad de Argo vaga por el espacio con sus habitantes viviendo felizmente protegidos por una cúpula. Entre otros muchos, allí viven Zor-El y Alura con su hija adolescente Kara. Kara es muy amiga del respetado -aunque imprudente- científico Zaltar, y durante uno de sus juegos la cúpula protectora de la ciudad resulta dañada y por el agujero se escapa la pequeña esfera que les sirve como fuente de energía: el omegaedro. Zaltar sabe que se ha ganado ser condenado a la Zona Fantasma, y Kara se aventura en una nave de hiperespacio que la conduce directamente a la búsqueda del omegaedro, que ha ido a parar a la Tierra. Si quiere que la ciudad de Argo, su familia y amigos sobrevivan, debe encontrarlo, porque sin esa fuente de energía la ciudad está condenada a morir en poco tiempo.