El fracasado guionista de Hollywood Steven Schats (Matthew Broderick) vive con la esperanza de que le acepten un guión, pero tiene que conformarse con un trabajo de taquillero en el Teatro Chino. Sin embargo, un día, después de que su guión haya sido rechazado mil veces, encuentra un productor (Baldwin) que se interesa por él. Lo que Steven ignora es que se trata de un agente del FBI y que el rodaje no será más que la tapadera de una misión secreta de la agencia.